Hace unos años quien quería dejar ver (o aparentar, de todo hay) que manejaba dinero se compraba un Mac. Luego llegaron los iPod, iPhone, iPad, iWatch, iManolArias y demás (en mi humilde opinión) chorradas… Todo el mundo quiere subirse al carro de la manzana, y cualquier cosa que empiece por «i» es sinónimo de prestigio, «sensación premium» y otras formas de llamar a esta nueva tendencia.

Como sabéis quien me conocéis, soy bastante crítico con la susodicha empresa, a pesar de que mis dos iChismes me han dado resultados excelentes. Pero como siempre digo, me encanta el Mercadona y no por ello llevo pegatinas en el coche con su logotipo, abro webs para explicar las grandísimas bondades de Hacendado ni dejo de ser crítico con sus aspectos negativos o, sencillamente, menos buenos.

Como suelo hacer de vez en cuando, hoy he dedicado unos minutos a revisar las nuevas extensiones de dominios. Hace unos años todo era .com, .net y otros pocos. Pero últimamente ya hay multitud de extensiones nuevas que, aunque algo más caras, creo que pueden aportar mucho significado a los nombres de las páginas web.

Pues bien, mi sorpresa ha sido mayúscula cuando he visto un precio que sobresalía en varias cifras con respecto a los demás. No, a pesar de mi introducción no se trata del .apple, .iphone ni ningún otro relacionado. Pero… no quiero ser aguafiestas, echad un ojo 🙂

¿Curioso eh? Ya sabéis, si tenéis dinero y podéis permitíroslo ya no es necesario comprar ningún iCacharro, que de eso tiene todo el mundo. Podéis comprar un manoloperez.rich y seréis la envidia de todo el mundo.

Otro día más! 🙂